"...seres rosados de unos cinco pies de largo, con
cuerpos revestidos de un caparazón provisto de grandes aletas dorsales o alas
membranosas y varios pares de patas articuladas, y con una especie de
intrincada forma elipsoide, cubierta con infinidad de antenáculos, en el lugar
en que normalmente se encontraría la cabeza." (...) "...una especie
de grandes cangrejos de color rojizo, con muchos pares de patas y dos grandes
alas como de murciélago en medio del lomo. Unas veces caminaban sobre todas sus
patas y otras solamente sobre el par trasero, utilizando las restantes para
transportar grandes objetos de naturaleza desconocida."
—H.P. Lovecraft, El que susurra en la oscuridad
—H.P. Lovecraft, El que susurra en la oscuridad
La presencia de los Mi-Go
no ha pasado desapercibida para los hombres, las distintas culturas del mundo
han recogido los diversos encuentros entre nuestra especie y estos extraños
seres extraterrestres, asimilándolo luego dentro de nuestros folclores, leyendas
y mitos. Ejemplos de esto, lo podemos encontrar a miles, desde los griegos que
los identificaban con los Kallikantzaroi, mientras que en la India se los
conocía como los semidioses llamados Nagas y en el Himalaya, las leyendas
tibetanas se referencia a ellos, curiosamente como Migou. Se los encontraba habitualmente
en las cordilleras más inaccesibles del Himalaya y que usaban las pieles de
animales para ocultar su apariencia, siendo hostiles a las personas. Estos
mismos relatos con el tiempo degeneraron en claras confusiones entre los Migou
con la criatura mítica de esos parajes como son los Yetis, pero los más sabios
conocían la naturaleza no-terrestre de estas criaturas y cuyos orígenes se
pierden en galaxias lejanas, más allá del contínuum espacio-tiempo
einsteiniano.
La localización de Yuggoth
sigue siendo un misterio para los astrónomos, las teorías más extendidas
proponen que Yuggoth no sería otro que el planeta enano Plutón, mientras que
los astrónomos más osados afirman que Yuggoth sería un planeta transneptuniano,
de gran tamaño aún por descubrir, que sería el culpable de la irregularidades
encontradas en la órbita de Neptuno y desde principios del siglo XX se busca
sin éxito. Sea como fuere, aquellos que entre delirios pudieron vislumbrar este
terrorífico cuerpo celeste lo describen como:
En Yuggoth hay inmensas ciudades... interminables hileras de
torres construidas en terrazas de piedra negra, como la muestra que traté de
enviarle. Procedía de Yuggoth. La luz del sol no es más fuerte que la de una
estrella, pero los seres no precisan luz. Poseen otros sentidos más sutiles, y
en sus mansiones y templos no hay ventanas. La luz incluso les hiere, molesta y
entorpece sus movimientos, pues no existe la menor traza de ella en el oscuro
cosmos allende el tiempo y
el espacio del que son originarios. Bastaría una visita a
Yuggoth para volver loco a un hombre débil... pero yo voy a ir allá.
Los ríos negros de alquitrán que discurren bajo esos
misteriosos puentes ciclópeos.obra de una antigua raza.extinguida y olvidada antes de que los seres llegaran a Yuggoth procedentes de los últimos vacíos, debieran bastar
para hacer un Dante o un Poe de cualquier hombre.., si conserva el
juicio el tiempo suficiente para contar lo que ha visto.
- H.P. Lovecraft, El que susurra en la oscuridad
Algunos manuscritos antiguos estimas que los Mi-Go llegaron
a la tierra en la época Jurásica, hace aproximadamente 160 millones de años,
llegando desde Yuggoth, con la intención de extraer minerales y encontrando una
fuerte oposición con los Antiguos, otra raza alienígena que ya habitaban la
Tierra millones de años antes que estos invasores. Llegando así a un
enfrentamiento contra los Mi-Go en el espacio. Los combates posteriores entre
ambas razas desembocan un firme control de los Mi-Go sobre el norte globo, algunos
afirman que estas batallas quedaron registradas en el poema épico hinduista
Ramaiana, donde los dioses guerreaban en el cielo con extraordinarios
artefactos voladores… el intentado ahondar en esto, pero la gran mayoría de
escritos se han perdido a lo lardo del tiempo.
Las pocas autopsias que se
pudieron hacer al cuerpo de un Mi-Go, ya
que al morir sus cuerpos suelen disolverse al cabo de las horas, revelaron que
estos seres no pertenecen al reino animal como cabría esperar, sino más bien a
la familia de los fungí. Está singularidad se marca aún más al examinar a nivel
subatómico, vemos que con la materia con la que están hechos estas criaturas,
no pertenecen a nada que hayamos visto en este planeta. La anatomía de los
Mi-Go se asemeja a la de los insectos o los crustáceos, con una altura de 6
pies (1,82 m aproximadamente), con múltiples patas con pinzas, alas membranosas
con las que les permite volar, incluso pudiendo desplazarse en el vació del
espacio, y una cabeza ovalada que cambia constantemente de color que le permite
comunicarse entre sí.
Sobre la memoria de los
“Hongos de Yuggoth”, la forma en la que almacenan la información y sus
recuerdos, sólo podemos calificarla como aberrante para los humanos. Los Mi-go
eliminan de su mente toda aquella información que no es necesaria, dejando lo
imprescindible para sus objetivos inmediatos, está técnica les es útil para evitar
cualquier información irrelevante para sus propósitos, pero por culpa de la
misma, mucha información sobre su historia se ha perdido en el proceso. Una
hipótesis se ha gestado a raíz está peculiar forma de procesos memonicos en los
Mi-Go y es por uno de los artefactos más extraños creados por ellos, que es el
Cilindro Cerebral. Este máquina de neuro-cirugía extrema, permite transportar
un cerebro previamente extraído de un ser vivo, manteniendo todas sus
actividades cognitivas, la posibilidad el cerebro a interactuar a través de
unos censores con otros seres en ese estado. Incluso se han dado casos de que
los Mi-Go han extraído cerebros de algunas personas y luego transportaron por
el espacio a otros planetas y a otras dimensiones.
Creo que tales artefactos
fueron creados para transportar los cerebros de los mismos Mi-Go de un lado a
otro, para ser injertados en cualquier miembro de la colmena, de esta forma
funcionaría como un sistema de almacenamiento de información biológico, como si
de un disco duro extraíble se tratase y donde los Mi-Go van recolectando estos
“datos” en algún archivador de memoria a gran escala. Es más, me aventuraría a
decir que la versatilidad y la resistencia de los cuerpos de los Mi-Go a
temperaturas extremas, al vacío estelar y a las distintas radiaciones que
existen en ese entorno, no es fruto de algún largos proceso darwiniano de
selección, sino es obra de ingeniería genética. Pienso que en una época
pretérita ya olvidada, esta raza poseía otros cuerpos y la necesidad que los impulso
a desplazarse a otros mundos, les llevo a desechar sus antiguas carcasas,
sustituyéndolas por estas forma grotescas, al ser más útiles en sus cometidos.
Esta es una mera especulación, meros delirios de una mente ya perturbada.
Lo que tenemos claro es
que la tecnología de los Mi-Go están miles de años por delante de la nuestra,
siendo una amalgama de ciencia y metafísica, usando el oscuro conocimiento
sobre los Dioses Exteriores, que adoran fervientemente, para generar su
tecnología. Sabemos que ellos fueron los creadores de artefactos tan poderosos
como el Trapezoide Resplandeciente, un objeto que controla a una entidad
conocida como el Morador de la Oscuridad, uno de los avatares del dios
Nyarlathotep y que a partir de una Semilla de Azathoth, crearon a Ghadamon, un
Primigenio en estado larvario, un acto antinatural totalmente. Dentro de las deidades
abominables que los Mi-Go profesan su culto, encontramos como no podía ser, la
del dios exterior Nyarlathotep como a la diosa Shub-Niggurath y Yog-Sothoth. En algún
blasfemos pergamino se dice que “Aquel que no debe ser nombrado” desprecia a
los Mi-Go, he insta a sus sectarios que eliminen cualquier presencia de estas
criaturas cazándolas y exterminarlas, ignoramos cual es el motivo de esto, pero
se cree que vendría de un conflicto entre los Mi-Go y los Primigenios, la cual
motivo que los Hongos decidieran migrar a nuestro sistema solar.
Los Mi-Go, han encontrado
en nuestra especie, una insana curiosidad, utilizando a los hombres como sus
cobayas para sus extraños experimentos. Algunos apuntan que los Mi-Go ven a la
humanidad como un serio competidor de recursos y una posible amenaza a largo
plazo. Esto ha llevado que estas criaturas a infiltrarse entre nosotros, tanto
ocupando puestos estratégicos dentro de nuestras sociedades como estando detrás
de la gran avalancha de casos de abducciones que se han constatado a lo largo
del tiempo, que erróneamente los ufólogos las atribuyen a los seres llamado
“Grises”. Es más, algunos investigadores afirman que estos grises son solo una
mera mascara utilizada por los Mi-Go para ocultar su presencia, insertando
falsos recuerdos en sus víctimas para poder experimentar en ellas.
En otro
ámbito los Hongos de Yuggoth también contribuyendo a la creación de ciertas tecnológicas
que solo nos conduce a una entropía mental, un aborregamiento sistemático de la
humanidad. Las evidencias apuntan a que ellos fueron los que impulsaron la
creación de la televisión y ahora actualmente están detrás de la gran mayoría de
Redes Sociales, esto solo sirve para evitar cualquier avance que nos permita
como especie despertar de este letardo existencialista que vivimos, y por fin
ser consiente de nuestra realidad… que realmente somos prisioneros en este
mundo, miembros de una granja humana, atrapados como animales de corral a
merced de insondables y horrendas fuerzas inhumanas, que nos controlan y nos
vigilan con oscuras intenciones que no logramos discernir...
Fuentes:
La llamada de Cthulhu, El juego de Rol, por La Factoría de
ideas.
Mi-go, Wikipedia y similares.
Enciclopedia de los Mitos de Cthulhu de Daniel Harms.
Mi-go, Wikipedia y similares.
Enciclopedia de los Mitos de Cthulhu de Daniel Harms.
Y algo de mi parte…